jueves, 28 de abril de 2011

Video que presenta a Aristóteles

Cómo aprendí a ...

Aristóteles, Metafísica, Libro I, cap. 1 fragmentos

Todos los hombres por naturaleza desean saber. Señal de ello es el amor a las sensaciones. Éstas, en efecto, son amadas por sí mismas, incluso al margen de su utilidad y más que todas las demás, las sensaciones visuales. Y es que no sólo en orden a la acción, sino cuando no vamos a actuar, preferimos la visión a todas –digámosolo- las demás. La razón estriba en que ésta es, de las sensaciones, la que más nos hace conocer y muestra múltiples diferencias.
Pues bien, los animales tienen por naturaleza sensación y a partir de ésta en algunos de ellos no se genera la memoria, mientras que en otros sí se genera, y por eso estos últimos son más inteligentes y más capaces de aprender que los que no pueden recordar: inteligentes, si bien no aprenden, son aquellos que no pueden percibir sonidos (por ejemplo, la abeja y cualquier otro género de animales semejante, si es que los hay); aprenden, por su parte, cuantos tienen, además de memoria, esta clase de sensación. Ciertamente el resto (de los animales) vive gracias a las imágenes y a los recuerdos sin participar apenas de la experiencia, mientras que el género humano (vive), además gracias al arte y a los razonamientos. Por su parte, la experiencia se genera en los hombres a partir de la memoria: en efecto, una multitud de recuerdos del mismo asunto acaban por constituir la fuerza de una única experiencia.
La experiencia parece relativamente semejante a la ciencia y al arte, pero el hecho es que, en los hombres, la ciencia resultan de la experiencia. (…) Los hombres de experiencia saben el hecho, pero no el porqué, mientras que los otros conocen el porqué, la causa.
(…)
El hombre de experiencia es considerado más sabio que los que poseen sensación del tipo que sea, y el hombre de arte más que los hombres de experiencia, y el director de la obra más que el obrero manual, y las ciencias teoréticas más que las productivas.
Es obvio, pues, que la sabiduría es ciencia acerca de ciertos principios y causas.

martes, 19 de abril de 2011

Cómo aprendí a ...

Evoquen una situación en la que hayan aprendido "algo": a nadar, a escribir, a andar en bicicleta, a bordar o tejer, a usar una máquina, etc.
Destaquen qué operaciones pusieron en marcha para aprender, si tuvieron alguien que les enseñó, sí lo hicieron por ensayo y error, si observaron a alguien, si tomaron un manual de instrucciones, si lo hicieron de grandes o de chicos, cómo les surgió la necesidad de aprender, a partir de qué situación.


Las clases de la primera semana

La semana pasada estuvimos trabajando a partir de la lectura de "Un vaso nunca es un vaso" texto de Abrevaya. En la prmiera clase discutimos respecto de puntos de vistas sobre diversos objetos y discutimos si había puntos de vista mejores que otros. En la segunda clase, plagiamos el texto escribiendo sobre otro objeto.


martes, 12 de abril de 2011

¿Es un vaso?


¿Querer conocer antes de conocer?

"Un punto de vista capital de la filosofía crítica consiste [en la afirmación de]que antes de emprender el conocimiento de Dios o de la esencia de la cosas, es preciso investigar previamente si la facultad de conocer es capaz de semejante tarea, hay que conocer el instrumento antes de emprender el trabajo que se debe realizar por medio de él, pues si [el instrumento] no fuese adecuado, se emplearía vanamente el esfuerzo. Este pensamiento ha parecido tan plausible que ha provocado la mayor admiración y asentimiento y ha retrotraído el conocimiento hacia sí mismo, desde su interés por los objetos a la ocupación consigo, es decir, al interés por lo formal. Pero si uno no quiere engañarse con las palabras, le resulta fácil ver que otros instrumentos, desde luego, se dejan investigar y juzgar mediante otro procedimiento que no sea la aplicación al trabajo peculiar al que están destinados. Con este, así llamado instrumento, la investigación no significa otra cosa que conocerle. Y querer conocer antes de conocer es tan insensato como el sabio propósito de aquel escolástico de aprender a nadar antes de echarse al agua."
Hegel, Encilopedia de las Ciencias Filosóficas, Introducción, 10.

lunes, 11 de abril de 2011

Un vaso nunca es un vaso

"Un vaso es un recipiente. Es lo que contiene. Es un vaso de whisky, canchero, ancho, chancho, con hielo, tintineante. Es un vaso de vino, alcohólico, sobre la madera castigada de la mesa de un bar de cuarta, mástil del que se aferra un borracho tempestuoso. Es un vasito de caña, de ginebra, un glup ardiente. Es un vaso de agua para reponernos de algo. Se dice: con agua. Pero es de agua. Es el agua que tiene. Es un vaso vacío: una cosa que espera la oportunidad de ser colmada, de servir, de tener sentido. Es un vaso vacío en algún otro lado, que exige ser repuesto en su lugar correspondiente. O es un vaso con otros vasos, esperando que lleguen las visitas. Un vaso también es un resto de alguna bebida que quedó en el vaso. Un resto. Lo que sobró de una división, de cuando se dividieron las personas. Un testimonio de la vida que pasó, como una cuenta imperfecta. Un vaso es el lugar en el que está. Por ejemplo, en la alfombra, volcado, adormecido por los efectos de la fiesta. También es un edecán que hace guardia, parado en la mesita de luz; junto al enfermo. Y en el baño es un farmacéutico. Y tirado al aire libre es una barbaridad de gente desaprensiva con el cuidado de los espacios públicos. A veces, un vaso es un recuerdo de otros vasos, de otro juego. Un sobreviviente jubilado, clase pasiva en el viejo aparador o ex combatiente destinado a cumplir misiones sin prestigio. Un vaso es el vaso que cada uno imagina, que es mucho más que un vaso. Es un vasito descartable, muy descartable, de color resignado. Es un vaso alto, transpirando frescura publicitaria de deseos paradisíacos. Es un colorido vasito de cumpleaños infantil, gorrito dado vuelta. Es un vaso irrompible, seguro alarde de la practicidad tecnológica, hasta que se rompe, volviéndose una sorpresa. Un vaso es una lente que nos permite ver las cosas deformadas, haciéndonos creer que después las vemos tal cual son y no tal cual las vemos, simplemente. Un vaso es un frío. Con el borde cascado es un peligro, una incitación al suicidio. También es una boca que aguarda el beso de otras bocas. Es una copa, estirada, que se siente de otra clase. Es una taza que pertenece a otro mundo. Es un balde para el caballo. Es una prueba de circo, angustiante, en las manitos de un nene. Es el cristal que lo hace fino o el plástico que lo abarata. Es un conjunto de moléculas unidas por una minuciosidad olvidada, una pieza arqueológica que cuenta la versión de una cultura, otra estructura superada por el uso, otra industria de la repetición, una fuente de recursos que permite comprar cosas para poner adentro de otros vasos, una necesidad que vimos en oferta acá a la vuelta, un delicado problema de embalaje, un medidor de torpeza en el lavado, un regalo de bodas, acaso un infinito que holgadamente nos supera. Un vaso nunca es un vaso. Es la palabra vaso, sus letras, su sonido. Es una voz que dijo «vaso», alguna vez...., y lo sigue diciendo en cada vaso. Hasta puede ser la prueba de cuántas personas se reunieron allí, esa fatídica noche. O la superficie donde quedan impresas las huellas dactilares del presunto asesino. O nada. ¿Vaso? ¿ Qué vaso?.... Un vaso nunca es un vaso. Y esto se puede comprobar haciendo el intento de encontrarse con exactamente un vaso y nada más que un vaso. Tampoco será un vaso. Será un misterio." (artículo de Abrevaya publicado en Página/12 el 27/11/1991)

Preguntas para el diálogo:



Diálogo: preguntas - ¿cuántas cosas puede ser un vas? - ¿qué quiere decir “un vaso nunca es un vaso? ¿Quien conoce mejor... ? - tus dientes? a) vos, b) el dentista; - la luna? a) un astronauta que la visitó; b) una astrónoma que la observa desde el telescopio; c) un poeta que escribe sobre ella. - un triángulo? a) un nene que los está aprendiendo a reconocer, b) un geómetra, c) una dibujante - la justicia o el bien y el mal? a) un juez, b) un sabio, c) un sacerdote, d) todos y todas

Vasos